Por vertido se entiende la evacuación controlada de agua o aguas residuales de un sistema, ya sea una masa de agua natural, una instalación de drenaje o una planta industrial de tratamiento de aguas o de tratamiento de aguas residuales. En los sistemas técnicos, la descarga es un parámetro decisivo para la gestión de los volúmenes de agua y aguas residuales, ya que influye tanto en la capacidad hidráulica como en la eficiencia del tratamiento de las aguas residuales.
Índice
Antecedentes técnicos
En el tratamiento industrial de aguas y aguas residuales, la descarga desempeña un papel fundamental en el diseño y funcionamiento de tuberías, sistemas de bombeo, sistemas de alcantarillado y balsas de tratamiento. La descarga puede ser por gravedad o por bombeo, dependiendo de las condiciones locales y del diseño del sistema. Se mide en metros cúbicos por hora (m³/h) o litros por segundo (L/s) y garantiza que el agua o las aguas residuales se canalizan a través del sistema de forma continua y controlada.
Tipos de descarga
Escorrentía natural: La escorrentía natural se produce en masas de agua como ríos, lagos y arroyos, donde el agua fluye bajo la influencia de la gravedad. En la gestión del agua, la escorrentía natural se utiliza para regular el exceso de agua procedente de las precipitaciones o de las aguas subterráneas. En la industria, puede utilizarse para verter de forma segura agua depurada en aguas públicas.
Vertido industrial: En la tecnología de aguas y aguas residuales industriales, el vertido se refiere a la eliminación controlada de aguas residuales tratadas o aguas de proceso de la instalación de tratamiento. Este vertido se realiza en tuberías de aguas residuales, balsas colectoras o directamente en masas de agua naturales. Los vertidos industriales suelen estar sujetos a estrictos requisitos legales en materia de calidad y cantidad de agua.
Vertido hidráulico en las depuradoras de aguas residuales: En las depuradoras de aguas residuales, el vertido se refiere al volumen de agua que llega a la salida después del tratamiento previo, principal y secundario y que posiblemente se vierta a la red de alcantarillado público o a una masa de agua. El vertido debe controlarse con precisión para evitar sobrecargas hidráulicas en los clarificadores y las estaciones de bombeo.
Vertido por desbordamiento: Se produce un vertido por desbordamiento cuando el sistema de aguas residuales se sobrecarga, por ejemplo, durante lluvias torrenciales o inundaciones, y ya no es capaz de absorber todo el volumen de agua. El exceso de agua se evacua de forma controlada mediante sistemas de desbordamiento para evitar daños en el sistema de drenaje. Este vertido de emergencia suele canalizarse hacia aguas receptoras o cuencas de desbordamiento de aguas pluviales.
Importancia para el diseño de sistemas de agua y aguas residuales
El cálculo preciso y el control del vertido son cruciales para el diseño de los sistemas de tratamiento de aguas y aguas residuales, ya que la carga hidráulica del sistema se controla a través del vertido. Durante la planificación y el diseño deben tenerse en cuenta los siguientes aspectos:
Dimensionamiento de tuberías y bombas: La capacidad de descarga determina el diseño de las tuberías y los sistemas de bombeo de un sistema. Con volúmenes de descarga elevados, las secciones transversales de las tuberías deben ser mayores y las bombas deben dimensionarse de forma más eficiente para garantizar un transporte fluido del agua. Si la capacidad de descarga es demasiado baja, existe el riesgo de remanso, que puede perjudicar el funcionamiento del sistema.
Carga hidráulica de los clarificadores: En los clarificadores y reactores, la descarga sólo debe ser lo suficientemente alta como para garantizar un tiempo de retención suficiente de las aguas residuales. Esto es necesario para que los microorganismos tengan tiempo suficiente para descomponer las impurezas orgánicas y los procesos físicos, como la sedimentación o la filtración, puedan tener lugar eficazmente. La sobrecarga hidráulica debida a una descarga excesiva reduce el rendimiento de limpieza del sistema.
Control y seguimiento del vertido: En los sistemas de aguas residuales industriales, las mediciones del caudal y los controles del vertido son cruciales para garantizar que el vertido cumple los requisitos especificados. Esto incluye tanto el volumen hidráulico como el cumplimiento de las concentraciones de contaminantes permitidas. Para supervisar y controlar el vertido en tiempo real se utilizan válvulas de control, controladores de bombas y caudalímetros.
Capacidades de desbordamiento y gestión de emergencias: En sistemas con volúmenes de agua impredecibles o muy fluctuantes, como en la industria alimentaria, debe disponerse de capacidades de desbordamiento para emergencias con el fin de desviar las masas de agua que se producen durante los picos de carga. Los rebosaderos de emergencia y los sistemas de retención desempeñan aquí un papel importante para proteger el sistema principal de la sobrecarga.
Conclusión
La descarga es un parámetro decisivo en la tecnología del agua y las aguas residuales que tiene un gran impacto en el diseño y el funcionamiento de los sistemas. Influye en el dimensionamiento de tuberías, bombas y depósitos y garantiza que la cantidad y calidad del agua se canalice a través del sistema de forma controlada. El control del vertido es crucial para la eficacia y la seguridad operativa de las plantas de tratamiento de aguas y de depuración de aguas residuales. La supervisión y el control precisos del vertido garantizan el cumplimiento de la normativa medioambiental y la funcionalidad del sistema.